Marruecos: la última esperanza para que el Mundial siga siendo mundial

Catar 2022 fue la primera Copa del Mundo que juntó a todos los continentes en octavos de final, pero al cabo de una sola fase Sudamérica y Europa mostraron todo su poderío. La selección africana es el último bastión del 'resto del mundo'.

El Mundial Catar 2022 se ha caracterizado por los resultados sorpresas, tanto así que por primera vez en la historia todos los continentes estuvieron representados en los octavos de final, no solamente Europa y Sudamérica como es costumbre.

Corea del Sur y Japón por Asia, Australia por Oceanía (aunque juega por la Confederación Asiática de Fútbol), Estados Unidos por Norteamérica y Senegal junto a Marruecos por África, aunque salvo este último todos quedaron fuera rápidamente.

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Corea recibió cuatro goles de Brasil, mientras que Senegal y los norteamericanos se llevaron tres de Inglaterra y Francia, respectivamente. Los socceros fueron más competitivos ante Argentina, pero no pudieron ante una gran actuación de Lionel Messi y los nipones obligaron a Croacia a llegar hasta los penales.

Por lo mismo los 'Leones del Atlas' son la gran esperanza del 'resto del mundo' en la lucha de romper la hegemonía que históricamente tienen Conmebol y UEFA, aunque en los últimos años estos últimos han dominado. De hecho, en Rusia 2018 sólo hubo semifinalistas europeos.

Marruecos, la gran revelación del Mundial Catar 2022

Los marroquíes llegaron con pocas luces, con un cambio de técnico luego de la Copa Africana de Naciones y la llegada Walid Regragui, pero en un grupo complicado con Croacia, Bélgica y Canadá mostraron categoría para quedarse con el primer lugar.

Con su segunda clasificación a la ronda de 16 mejores luego de México 1986, los africanos tuvieron un duro duelo ante España e impusieron sus términos. Le entregaron la pelota a los dirigidos por Luis Enrique, pero nunca recibieron daño y en los penales se mostraron mucho más sólidos para hacer historia.

Ahora de la mano de sus figuras Achraf Hakimi, Hakim Ziyech y Sofyan Amrabat, han ilusionado a sus hinchas y esperan superar lo hecho por Camerún 1990, Senegal 2002 y Ghana 2010, las otras selecciones africanas que quedaron entre los ocho mejores.