Publicidad

La advertencia de Pablo Milad a los clubes cuyas barras hagan desmanes: "Tendrán que gastar más"

  • Fútbol Nacional

El máximo directivo del fútbol chileno señaló que los clubes más conflictivos serán los que se lleven más gastos. Pero esta idea no es nueva: la "tropa de élite" se estrenó y discontinuó hace casi dos años.

Publicidad

El presidente de la ANFP Pablo MIlad está en pleno plan de renovación de los planes de seguridad del fútbol chileno y en esa instancia, destacó que los clubes, cuyas barras sean las más conflictivas, son quienes se llevarán el mayor gasto de esta iniciativa.

Para ello, el ex intendente del Maule señaló: "Estamos hablando y conversando con los clubes. Siempre que se habla de estas cosas asoma la palabra gasto, pero acá nosotros vamos a solicitar unos recursos especiales que hay en FIFA y Conmebol para llevar adelante todo esto", recogió el diario El Mercurio.

En ese sentido, añadió Milad: "van a tener que gastar más los equipos cuyas barras provocan actos delictuales. Estas fuerzas especiales de guardias, por llamarlas de alguna manera, que tendrán una separación distinta y estarán más equipadas, serán un requisito para todos los clubes de alta convocatoria".

La idea de Milad no es nueva en el fútbol chileno

Durante la movilización social de octubre de 2019, un grupo de barra bravas de Colo Colo ingresó al juego de La Calera e Iquique que se desarrollaba en el Municipal de La Florida y supero tanto a la policía uniformada como a la seguridad privada que había puesto el cuadro de la región de Valparaíso. El fútbol chileno bajaba abruptamente la cortina aquella temporada.

En el verano de 2020, la ANFP organizó la liguilla de ascenso a Primera División que se jugó íntegramente en el Estadio Nacional y para garantizar que los hinchas más radicales no alterasen el desarrollo de la misma, la ANFP instaló una "tropa de élite": guardas privados con casi las mismas facultades que el cuerpo de Fuerzas Especiales de Carabineros.

Sebastián Moreno, presidente de la ANFP en ese entonces, señaló: "El bochorno en La Florida lo que hace es dejar en evidencia la fragilidad del sistema. No puede ser que ocho delincuentes ingresen al estadio existiendo 50 carabineros afuera. Esta situación no es aceptable y deja en evidencia que el sistema no funciona, y que no viene funcionando hace años (...) Tenemos que erradicar a las barras bravas de los estadios del fútbol chileno".

No fue necesario el uso de estas FF.EE. privadas, ya que no hubo incidentes en aquel instante: "Esto lo desarrollamos con Estadio Seguro, Carabineros y la Intendencia. El foco de Sebastián Moreno es mejorar la experiencia del hincha en el estadio antes, durante y después de cada partido" señaló Rodrigo Robles quien fuera Gerente de Ligas Profesionales aquel año.

Publicidad