El duro inicio de Darío Osorio en la U: “Me llamaba a las 3 de la mañana y me decía ‘mamá ven a buscarme’”

Alicia Osorio conversó con Deportes 13 y repasó los inicios de su hijo, sus primeros años en la U y el futuro que vislumbra para la "Joya" de Hijuelas.

Darío Osorio asoma como uno de los jugadores jóvenes con más proyección del fútbol chileno. El futbolista de 18 años se afirmó como titular en la U y tuvo su debut con la Selección Chilena en el duelo frente a Túnez en la gira por Asia.

Mientras vive este buen presente, su familia lo apoya desde Hijuelas en la Región de Valparaíso. Alicia Osorio es una de las más emocionadas con su presente, la madre de Darío Osorio lo apoya desde su casa y cada vez que puede viaja a verlo a sus partidos.

Tras el debut del novel jugador en la Roja, su madre recibió el llamado de Deportes13 y repasó todas las etapas del promisorio canterano de la U, quien llegó a Santiago a los 11 años para cumplir su sueño de ser futbolista.

¿De dónde viene el gusto por el fútbol de su hijo? 
- Toda la familia es futbolera, mis hermanos, mis tíos, mi papá, todos. A uno de mis hermanos (Alexis) lo vino a buscar Colo Colo, pero como a mi mamá no le gusta el fútbol, no lo apoyó como yo con Darío. Yo creo que por ahí va la cosa, a él de chiquitito le gustaba la pelota, desde que empezó a caminar andaba con el balón en los pies. Le voy a confesar algo, yo tenía 6 meses de embarazo cuando me enteré venía Darío y yo estaba jugando a la pelota. Se llevó todo lo que yo podría haber jugado después.

¿Y dónde jugaba usted?
- Mi club es Magallanes de Hijuelas. Hasta el día de hoy todavía juego, pero lo mínimo. Ahora mi posición es lateral, antes jugaba de delantera. Después de 15 años volví, acá está súper fuerte el tema del fútbol femenino así que se retomó bien.

¿Cómo fueron los primeros pasos de Darío en el fútbol? ¿Alguien le dijo que tenía futuro?
- Darío empezó cuando tenía 4 años en la escuela de fútbol de acá (Municipal Hijuelas). Su equipo era Deportivo Magallanes. En un partido lo vieron y se lo llevaron a Comunitaria El Melón, ese fue el nexo para que vinieran a ver niños. Lo descubrió el 'Profe Cristóbal' que era un captador y lo llevó a Santiago a otra prueba masiva, fueron como 3 meses intentando quedar en la U.  Había una señora, Patricia Fernández que le tenía mucha fe a Darío, pero lamentablemente no alcanzó a verlo ni en la Selección Sub-17 porque falleció, pero yo creo que del cielo lo mira y se acuerda.

¿Cómo fue cuando se lo llevaron a la U?
- Yo no quería que se quedara, el primer año entrenaba una vez a la semana y jugaba un fin de semana, pero después nos llamaron y nos explicaron que por nuevas reglas del Club ya no querían jugadores satélites, querían jugadores que entrenaran como el resto. Para mí era difícil porque tenía 11 años recién cumplidos, estaba chiquitito y después, corazón duro nomás. De primera Darío me dijo 'Sí sí, quiero ir', pero los primeros meses le costaba, nos llamaba en la noche y eran las 2-3 de la mañana y me decía mamá ven a buscarme. Ellos tuvieron harta paciencia, fueron como 3 meses que me lo llevaba y lo traía, me lo llevaba y lo traía. 
 

La personalidad de Darío Osorio

¿Cómo es la personalidad de su hijo? Lo catalogan como muy tímido...
- Cuesta comunicarse con él, es muy reacio a todo eso, no le gustan las cámaras. Tuvo que madurar y volverse independiente, se fue muy chiquitito y eso hace que se pierden muchas cosas. Pero yo tengo 4 hijos y tengo una nieta, y cuando lo vemos él anda en las camas saltarinas como un niño, en los columpios como la plaza, es así cuando vuelve a la casa. Darío es un niño, todos lo ven muy grande pero en el entorno nosotros lo vemos de otra forma. 

¿Cómo es convivir con el momento mediático de Darío Osorio?
- Él es muy de bajo perfil entonces no es que no le guste, pero la gente piensa que es pesado y que se cree el cuento porque no se saca fotos, pero si supieran lo que le cuesta salir a la calle para que no lo reconozcan. Él siempre ha sido así.

¿Cómo se lo toman en Hijuelas?
- Es rico igual cuando uno va con él y lo reconocen. Acá Hijuelas es una comuna chica, entonces todos están pendientes, de acá nunca había salido un seleccionado. Es de los pocos jugadores que han jugado en equipos grandes en Santiago. Son pocos los que han logrado lo que Darío lleva hasta ahora. Es como la sensación de acá.

¿Cómo lo ve usted a su hijo?
- Yo siento que él no asume lo que está viviendo, porque yo le digo 'hijo, ¿cómo estás?' y me dice ' bien, acá con los compañeros'. Pero estar con la Selección yo creo que es demasiado y él aún no toma el peso de lo que está viviendo.

El futuro de "La Joya" de Hijuelas

Dicen que Darío Osorio podría salir pronto al extranjero...
- Todos me dicen que con la gira por Asia y lo que ha vivido Darío se va a ir, nosotros como familia no queremos que se vaya todavía porque queremos que crezca en el club. La U le ha dado todas las herramientas, le dieron los estudios, había una asistente social que estaba preocupada, los mismos 'profes', nosotros tenemos una buena experiencia en ese sentido. Yo creo que tiene que consolidarse acá en el club y como el mismo ha dicho, salir campeón con la U. Cuando tenga 20 años me parece que está bien que se vaya.

¿Dónde se lo imagina jugando?
- Para mí que juegue en uno de los mejores clubes, no sé Barcelona, Manchester, lejos, lejos. Yo le digo que me tiene que llevar, no me puede dejar acá porque después se va a poner a pololear y se va a olvidar de la mamá.

¿Es muy celosa usted de Darío Osorio?
- Yo le digo que a veces hasta yo quiero que tenga polola a ver si cambia un poco su carácter, pero él me dice que está enfocado en el fútbol. Pero igual, en Instagram ahora yo tengo un montón de sobrinas, me escriben me dicen "hola suegra" o "gracias tía por darnos un futbolista como Darío". El otro día un niño me dice "usted me puede adoptar para que yo sea hermana de Darío".